La piel es el órgano más grande del cuerpo, es importante que le proporcionemos los nutrientes y la hidratación que necesita.
La piel es para toda la vida y por ello, debemos cuidarla siempre y no solo en verano, que es cuando nos preocupamos más por la “sobreexposición” al sol que solemos tener.
Además, con la pandemia, el uso de las mascarillas y el estrés emocional ha perjudicado nuestra piel. Ha empeorado muchas patologías cutáneas, como la rosácea, el acné, la dermatitis atópica o la psoriasis. El uso frecuente de los geles hidro alcohólicos ha afectado también la piel de las manos, por lo que debemos ser más conscientes de hidratarnos. La piel del rostro es muy sensible y delicada, ya que está en constante contacto con el ambiente. Para tener un cutis hidratado, nutrido y suave, es necesario tener un cuidado especial y evitar la exposición al calor, frío, sequedad y rayos de sol que en ocasiones crean un daño irreparable que es difícil de ocultar.
La fotoprotección es un hábito que debemos tener todo el año, no solo en verano, (es cierto que en verano debemos extremar más las precauciones, porque pasamos más tiempo al exterior y llevamos ropa más ligera, que nos cubre menos).
La radiación solar es la responsable directa de que aparezcan manchas y arrugas de manera prematura, a esto se le llama fotoenvejecimiento cutáneo.
Tu piel te agradecerá una dieta variada y equilibrada con el aporte de vitaminas, minerales y otros nutrientes como ácidos grasos. Las vitaminas a, c, e, b2 y b3, son importantes para la salud cutánea y super importante beber agua (2 litros diarios mínimo) para mantenerla hidratada.
Es importante que en tu rutina diaria realices cuidados especiales para el cuidado de la piel, y así prevenir que con el tiempo aparezcan arrugas, manchas y marcas.
En reto48, desde el área de body technology te recomendamos los siguientes consejos: